Un año más, desde el pasado jueves 9 hasta el 18 de marzo, el mundo del arte se concentra en Maastricht, la capital de la provincia de Limburgo, situada en ambas orillas del rio Mosa en el sur de Holanda. Maastricht cuenta con alrededor de 123000 habitantes y aparte de su gran oferta gastronómica, la feria de TEFAT es su evento más esperado.  El gobierno holandés invierte más de 3 millones de Euros en esta feria que es el destino de grandes coleccionistas principalmente europeos, y también asiáticos y latinos.

La feria de TEFAT se creó en el año 1988 y está considerada una de las más prestigiosas del mundo con una gran afluencia de grandes familias y fortunas. El aeropuerto durante esos días y sobretodo el día de la inauguración está desbordado de aviones privados. TEFAT es una feria de joyas, diseño, antigüedades y arte reuniendo obras del arte clásico, arte antiguo y llegando hasta las vanguardias del siglo XX.  Es un momento muy esperado por galeristas, ya que para muchos de ellos son los días cruciales para realizar sus transacciones anuales más importantes. Una buena recompensa por estar en Maastricht durante más de dos semanas enteras, ya que TEFAT es la feria más larga de todas y entre instalación, los días de feria y desinstalación los galeristas terminan pasando en Maastricht unos 20 días.

La feria se engalana con esculturales centros de flores, siendo protagonistas los emblemáticos tulipanes. Principalmente ubicada en un solo piso, los pasillos e intersecciones llevan nombres de importantes calles de ciudades. Esta particularidad inconfundible que aparentemente no parece importante es de gran ayuda al visitante, ya que hace que la feria mucho más fácil de recorrer. Otro factor que distingue a TEFAT de todas las demás organizaciones es la minuciosidad de su investigación. Días antes de su inauguración, y sin que los expositores estén presentes, los expertos de TEFAF estudian cada obra de arte en detalle, revisando e investigando la procedencia y verificando la atribución. Para ello, tienen acceso a los equipos técnicos más sofisticados, como microscopios digitales, las reflecto grafías UV e infrarroja, radiografías digitales y directas, y los espectrómetros portátiles de fluorescencia de rayos X. Los inspectores son temidos por los galeristas, ya que si no aprueban una obra la sacan de la feria, pero al mismo tiempo, esta cuidadosa investigación es un reflejo de la gran labor de TEFAT que posiciona a la feria en la cumbre de las mejores.

 

Continua leyendo en…https://okdiario.com/cultura/2018/03/09/lo-mejor-del-mundo-del-arte-mira-tefaf-maastricht-1942174